Video: Conductos pancreáticos
Estás mirando una vista previa. Suscríbete a Premium para acceder al video completo: Los conductos pancreáticos transportan las enzimas digestivas desde el páncreas hasta el duodeno.
Unidad de estudio relacionada
Artículos relacionados
Transcripción
Hoy nos encontramos en medio de un misterioso crimen, ¡un asesinato! El 22 de agosto de 1643, el profesor Johann Georg Wirsung fue asesinado a tiros por un estudiante belga llamado Jacques ...
Leer másHoy nos encontramos en medio de un misterioso crimen, ¡un asesinato! El 22 de agosto de 1643, el profesor Johann Georg Wirsung fue asesinado a tiros por un estudiante belga llamado Jacques Cambier. Sin ningún motivo aparente, se especuló en el gremio anatómico que el asesinato de Wirsung fue producto de un ataque de celos durante una discusión acerca de un descubrimiento. ¿Qué descubrimiento? Te estarás preguntando.
Sucede que en el año anterior a su homicidio, el Profesor Wirsung descubrió un conducto en el centro de un órgano abdominal, órgano que antes solo se consideraba parte del relleno de la cavidad abdominal. Hablamos del páncreas. Esto le permitió al Profesor Wirsung deducir que tal vez el páncreas era más importante de lo que se pensaba. En honor a su descubrimiento, este conducto se llamó conducto de Wirsung. Pero, ¿realmente este descubrimiento le costó la vida? Ese es un misterio que yo no puedo resolver, pero sí puedo ayudarte con el enigmático sistema de conductos pancreáticos.
Tal vez te interese saber qué estudiaremos en este tutorial, así que aquí va un pequeño recorrido. Empezaremos rápidamente con un repaso de la ubicación y anatomía básica del páncreas, solo para que te orientes. Después vamos a iniciar con el sistema de conductos, donde encontraremos dos muy importantes, el conducto pancreático, a veces llamado conducto pancreático principal y el conducto pancreático accesorio. Con estos dos en mente, discutiremos el sistema de conductos y sus componentes. Una vez hayamos terminado, concluiremos con las correlaciones clínicas, como siempre.
¿Qué dices, resolvemos el misterioso sistema de conductos pancreáticos? ¡Empecemos con la ubicación y anatomía básica del páncreas!
Primero, ¿qué es el páncreas? A pesar de conceptos erróneos previos, hoy sabemos que es un órgano importantísimo tanto para el sistema endocrino como digestivo, es decir, cumple dos funciones. Cerca del ochenta por ciento de su tejido funcional se dedica a la producción de enzimas esenciales para la digestión, lo que hace al páncreas un órgano exocrino. El resto, se dedica a la producción de hormonas como el glucagón e insulina, lo que también lo convierte en una glándula endocrina. Estas hormonas son cruciales para el metabolismo de la glucosa, lo que en palabras simples quiere decir que regula los niveles de azúcar en la sangre.
Una gran parte del páncreas se encuentra en el cuadrante superior izquierdo del abdomen; la mayoría detrás del estómago, el cual eliminamos en esta imagen. En el tutorial de hoy, nos enfocaremos en el páncreas y la porción del intestino delgado con la que se relaciona, el duodeno.
Continuando con la anatomía básica del páncreas, sabemos que contiene partes bien definidas en toda su longitud. Comenzando por el lado izquierdo, tenemos la cola del páncreas, que corresponde a la punta de este órgano y está ubicada cerca del bazo. Moviéndonos hacia medial, encontramos el cuerpo del páncreas. Habrás notado que es más ancho que la cola y que es la parte más grande.
A continuación tenemos al cuello, el cual como habrás imaginado, conecta el cuerpo con la cabeza del páncreas. Finalmente, la porción inferior de la cabeza se curva hacia la izquierda formando el proceso unciforme del páncreas. Este nombre viene del latin “uncinatus”, que significa enganchado, lo que tiene sentido en este caso.
Si exploramos el contenido celular del páncreas, veremos que está hecho de dos componentes, el endocrino y el exocrino. Este tejido representa el componente endocrino, que se agrupa en los denominados islotes pancreáticos o de Langerhans, el cual produce hormonas relacionadas con el metabolismo de la glucosa. Estas hormonas salen del páncreas por medio de capilares fenestrados dentro de los islotes. Por otro lado, el componente exocrino, es este tejido que rodea los islotes. Se compone en su mayoría de células acinares, que producen el jugo pancreático que contiene una gran variedad de enzimas digestivas. El jugo pancreático es lo que pasa a través del sistema de conductos pancreáticos.
¡Muy bien! Ahora sí vamos con el evento principal de hoy, el sistema de conductos pancreáticos. Vamos a iniciar con la estructura más pequeña del sistema de conductos, las células acinares, que producen el jugo pancreático. Estas células forman pequeños cúmulos, y cada uno de ellos se conoce como acino. El jugo pancreático sale del acino por medio de unos conductos cortos e intercalados que desembocan en los conductos intralobulillares. Varios acinos forman lóbulos, y los conductos intralobulillares de varios lóbulos luego se unen a los conductos interlobulillares o secundarios, que son de mayor calibre y terminan desembocando en un solo conducto pancreático.
Hablemos del conducto pancreático, también llamado pancreático principal, o de Wirsung, con un poco más de detalle. Así es, este es el mismo conducto que mencionamos sobre el misterioso asesinato que tal vez le haya costado la vida al Profesor Wirsung. El conducto pancreático se origina en la cola del páncreas, y es allí donde es más fino, con más o menos un milímetro de diámetro. Viaja a lo largo del páncreas con conductos interlobulillares drenando en él en ángulos agudos de manera continua, formando un patrón de espina de pez. En su trayecto, el conducto pancreático aumenta su calibre gradualmente y, en la cabeza del páncreas, su diámetro llega a medir alrededor de tres milímetros.
También debemos mencionar otro conducto que se encuentra en la cabeza del páncreas. Este conducto es el colédoco, que está formado por la unión de los conductos hepático común y cístico, los cuales conducen la bilis fuera del hígado y vesícula biliar respectivamente. La razón por la que mencionamos al conducto colédoco se debe a que este se une con el conducto pancreático para conformar lo que conocemos como ampolla hepatopancreática, que también es conocida como ampolla de Vater o unión pancreaticobiliar. Al igual que el Profesor Wirsung, la ampolla de Vater lleva el nombre del primero que la describió, Abraham Vater. Afortunadamente nadie trató de quitarle la vida por este descubrimiento. Otro dato curioso sobre este conducto, es que marca la transición entre el intestino anterior e intestino medio.
La bilis y enzimas digestivas luego de atravesar el conducto hepatopancreático entran al duodeno. Hablemos un poco acerca del duodeno y sus partes.
Relacionado al cuerpo del páncreas, nos encontramos con una parte del estómago conocida como canal pilórico, que puede ser considerada una transición entre el estómago y el duodeno. Al final del canal pilórico, tenemos al orificio pilórico, la puerta de entrada al duodeno. Cerca del cuello del páncreas, podrás encontrar la porción superior del duodeno. Después, la parte descendente del duodeno que posee forma de C, envuelve la cabeza del páncreas; en su parte superior está la flexura superior del duodeno, y en su parte inferior la flexura inferior del duodeno. Justo debajo del proceso unciforme, reposa la porción horizontal del duodeno. Continuando el recorrido, tenemos la porción ascendente, y finalmente nos encontramos con la flexura duodenoyeyunal, la cual indica el punto de transición entre el duodeno y yeyuno.
Recordando a la ampolla hepatopancreática, podemos verla ingresar a la parte descendente del duodeno a través de la papila duodenal mayor, que es una abertura en la pared duodenal, más o menos a nivel vertebral L2-L3. Surge entre los pliegues circulares que revisten el intestino delgado desde la porción descendente del duodeno.
Dato curioso: En aproximadamente el veinticinco por ciento de las personas, el colédoco y el conducto pancreático desembocan de manera independiente en el duodeno.
Tomémonos un minuto para pensar cómo funciona el sistema de conductos pancreáticos. El tracto digestivo, o el conjunto de órganos por el que pasan los alimentos y líquidos a medida que atraviesan el sistema digestivo, es en esencia un gran canal que se origina en la boca y termina en el ano. Si fuera simplemente una serie de tubos, habría una constante fuga de fluido, incluso cuando no estamos comiendo. Pero el cuerpo es inteligente e ingenioso y ha encontrado la solución. En cada uno de los conductos tenemos una estructura, parecida a una válvula, llamada esfínter. Cuando este se contrae, la fuga del conducto disminuye; cuando se relaja, por ejemplo después de haber digerido nuestro alimento, el flujo continúa.
En nuestro sistema de conductos pancreáticos, tenemos tres esfínteres. Uno que controla el flujo de bilis del colédoco y otro rodeando al conducto pancreático, controlando el flujo de enzimas pancreáticas. El último esfínter, se llama esfínter de la ampolla o de Oddi, que envuelve al conducto hepatopancreático.
Puedes haber notado que el conducto pancreático no es el único conducto del páncreas. Este pequeño amigo de aquí, en verde, se llama conducto pancreático accesorio, o de Santorini, y drena la parte superior de la cabeza del páncreas. Al igual que el conducto pancreático principal, este desemboca en la parte descendente del duodeno. Sin embargo, lo hace a través de una abertura diferente. Esta estructura de aquí, se llama papila duodenal menor. Es ligeramente más pequeña que la papila duodenal mayor, y se encuentra un poco más arriba.
¡Muy bien, es hora de ponernos la bata blanca y revisar una correlación clínica!
Hoy hablaremos de una condición con un nombre un poco extraño, que para algunos puede ser incluso más misterioso que la muerte del Profesor Wirsung. Esta condición se denomina pancreatolitiasis. El nombre simplemente significa formación de piedras o cálculos en el páncreas. La formación de cálculos es el resultado de pancreatitis crónica, o sea inflamación del páncreas. Esta inflamación como tal tiene múltiples etiologías, desde abuso de alcohol hasta trastornos de la glándula paratiroides, sin embargo la pancreatitis crónica no necesariamente produce formación de cálculos.
Aproximadamente el cincuenta por ciento de los casos de pancreatitis se asocian con cálculos, los cuales podrían formarse en el parénquima del páncreas, pero son más comunes en los conductos, ya sea en el conducto principal o en los más pequeños. Los cálculos, son depósitos de carbonato de calcio rodeando un nidus central, que es el centro del cálculo, y están hechos de materiales como níquel, hierro, y cromo.
El síntoma principal de estos cálculos es dolor pancreático, lo que puede deteriorar seriamente la calidad de vida del paciente. El dolor es el resultado del aumento de presión en los conductos obstruidos. El tratamiento puede ser la parte más interesante de los cálculos pancreáticos. Estos se detectan usando la colangiopancreatografía retrógrada endoscópica, o CPRE, que es un procedimiento en el que se introduce un tubo a través de la boca hasta el duodeno para inyectar un contraste, el cual avanza en dirección contraria a la bilis, para ubicar los cálculos.
Los cálculos pequeños pueden ser luego extraídos realizando una pequeña incisión en el esfínter, mientras que los grandes, requieren el uso de litotricia extracorpórea por ondas de choque. Mediante esta técnica los cálculos se rompen usando ultrasonido.
¡Muy bien! Hoy revisamos lo más relevante relacionado al páncreas . Repasemos un poco.
Empezamos rápidamente con la ubicación del páncreas y sus funciones como glándula endocrina y exocrina. También vimos sus divisiones anatómicas, la mayoría relacionadas con alguna parte del duodeno. Después observamos el orificio pilórico en el cual pudimos descubrir el esfínter pilórico.
Aprendimos que el cuello del páncreas se encuentra justo al lado de la parte superior del duodeno. La cabeza, cómodamente se ajusta a la porción descendente del duodeno, con sus flexuras duodenales superior e inferior; y finalmente, el proceso unciforme que se relaciona con la porción horizontal del duodeno y también la parte ascendente. El duodeno termina con la flexura duodenoyeyunal, el punto de transición al yeyuno.
Después, exploramos un poco la estructura interna del páncreas para entender la complejidad del sistema de conductos pancreáticos. Vimos que las enzimas pancreáticas se producen en los acinos, los cuales desembocan en pequeños conductos intralobulillares, que después forman grandes conductos interlobulillares, y estos últimos terminan uniéndose al conducto pancreático principal.
En la mayoría de las personas, el conducto pancreático se une con el colédoco para formar la ampolla hepatopancreática en la cabeza del páncreas. Nos encontramos con una serie de esfínteres que controlan el flujo a través de los conductos. Hablamos del esfínter del conducto colédoco, del esfínter del conducto pancreático, y del esfínter de la ampolla o de Oddi. También mencionamos al conducto pancreático accesorio, que cuando está presente, drena la parte superior de la cabeza del páncreas a través de la papila duodenal menor hacia la porción descendente del duodeno.
En nuestra correlación clínica, conocimos una condición muy dolorosa llamada pancreatolitiasis, en la que se producen cálculos pancreáticos que bloquean el sistema de conductos del páncreas.
Y con eso terminamos el tutorial de hoy. Espero que lo hayas disfrutado ¡Feliz estudio!