Ovario

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Los ovarios son estructuras pequeñas con forma de almendra en las cuales se desarrollan los oocitos y se producen las hormonas sexuales femeninas.

Los ovarios están envueltos externamente por una capa de epitelio escamoso simple conocida como mesotelio ovárico (una extensión del peritoneo), excepto en el sitio de inserción del mesovario, que suspende al ovario. En ovario propiamente dicho está rodeado por una cápsula gruesa de tejido conectivo denso fibroso, la túnica albugínea.

El ovario tiene una corteza, en la cual se encuentran los folículos ováricos, así como una médula altamente vascular.

Durante el desarrollo embrionario o fetal, las células germinales comienzan su diferenciación en oogonias, pasan por división celular (mitosis) antes de entrar finalmente en la profase de la meiosis I, pero sin completarla. En esta fase, las células se conocen como oocitos primarios y se forman típicamente para el quinto mes del desarrollo fetal, y permanecen dormidos en esta división meiótica hasta justo antes de la ovulación (por lo que pueden permanecer dormidos hasta por cincuenta años).

La corteza del ovario está repleta de folículos ováricos, los cuales pueden observarse en distintas fases del desarrollo:

• Los más numerosos son los folículos primordiales, que contienen un único oocito primario pequeño (como se describió anteriormente) rodeado por una sola capa de células epiteliales escamosas foliculares.
• Los folículos primordiales se transforman en folículos primarios mediante el agrandamiento del oocito y cambios en el epitelio folicular, el cual se vuelve cúbico en apariencia. Una cubierta extracelular rica en glicógeno conocida como la zona pelúcida se desarrolla alrededor del oocito.
• Las células foliculares ahora se conocen como células de la granulosa y pasan por una estratificación, y en este punto el folículo se denomina como folículo secundario.
• Una vez que las células de la granulosa alcanzan un grosor de 6-12 capas celulares, aparecen pequeñas cavidades que contienen líquido folicular entre estas; estas cavidades eventualmente se unen para formar una sola cavidad grande llamada antro folicular, y en este punto el folículo se conoce como folículo terciario (vesicular/antral). Las células de estroma que rodean a las células de la granulosa forman una vaina de tejido conectivo alrededor del folículo, denominado teca folicular.
• El agrandamiento continuo del antro folicular, así como la proliferación de células de la granulosa, provocan que el folículo aumente de tamaño, hasta que eventualmente se convierte en un folículo maduro (preovulatorio). En esta fase, las células de la granulosa forman un montículo (cúmulo oóforo) sobre el que descansa el oocito, así como una única capa celular alrededor del oocito (corona radiata). En el folículo maduro, el oocito primario completa su primera división meiótica, después de lo cual pasa a llamarse ovocito secundario.

Luego de la ovulación, el folículo maduro roto inicialmente se conoce como cuerpo rubro (debido a la presencia de coágulos sanguíneos) antes de finalmente convertirse en un órgano endocrino transitorio llamado cuerpo lúteo. En caso de que no haya fecundación/implantación, o en la segunda mitad del embarazo, el cuerpo lúteo colapsa y es sustituido eventualmente por tejido conectivo hialino para formar el cuerpo albicans.

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