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Mejora tu aprendizaje de anatomía leyendo con eficacia

“Dímelo y lo olvidaré. Enséñame y lo recordaré. Involúcrame y aprenderé." - Benjamin Franklin

Aunque la gran mayoría de la gente entiende la conexión entre adquirir conocimiento, lectura e inteligencia, muy pocos aplican la frase de uno de los padres fundadores de los Estados Unidos. La lectura debe ser mucho más que una conversación unilateral donde el libro te enseña, o peor aún, simplemente te da información. Debe ser un intercambio orgánico y atractivo de respuestas. Debería ser una conversación.

La participación separa a los lectores activos y efectivos de los pasivos. Un excelente lector trata la interacción como una inversión empresarial. Hace una vista previa de la propuesta en cuestión, sigue disparando preguntas, analiza las respuestas, se centra en los aspectos clave y resume los aspectos clave. Cualquier pasividad, soñar despierto y garabatear resulta en una inversión inútil, que para un lector es tiempo. Si eres estudiante de nivel superior, el tiempo ya es tu enemigo. Si además de todo eso estás aprendiendo anatomía…

Afortunadamente, la lectura es una habilidad que se puede aprender, modificar y mejorar. Y existen varios tipos de lectura, que se ajustan a cada persona. En este artículo explicaremos el concepto de la persona que lee de forma efectiva, junto con técnicas que te ayudarán a unirte a este grupo élite de individuos.

Contenidos
  1. Lectura efectiva
  2. Errores comunes de lectura
  3. Método SQ3R
  4. Puntos clave
  5. Bibliografía
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Lectura efectiva

Desafortunadamente, la persona que posee una lectura efectiva es el unicornio de la educación de tercer nivel: en teoría podría existir, pero nunca ha sido visto. La ausencia no es sorprendente: dicha persona entra, completa la tarea, sale y tiene tiempo para hacer otras cosas. ¡Definitivamente no la verás perder el tiempo leyendo lo mismo dos veces!

¿Qué es la lectura efectiva? Para la anatomía y los materiales académicos, dicha lectura se refleja en la selectividad, el cuestionamiento, la evaluación, el enfoque y la eficiencia. Al practicar, la lectura se convertirá en mucho más que un ejercicio de familiarización porque absorberás y retendrás la información a un nivel más profundo.

¿Cómo puedes convertirte en una persona que lee de forma efectiva? Como todo en la vida, identifica características o comportamientos clave y trata de emularlos cuando lees. Estos son los aspectos que desmitifican a estos individuos escurridizos:

  • Lectura activa 
  • Analizan o evalúan si el texto y la lectura cumplen con los objetivos preestablecidos
  • Las personas que leen de forma efectiva obtienen una vista previa del texto, observan el formato general, la estructura, los encabezados, etc.
  • Intentan predecir lo que van a leer.
  • Su lectura es selectiva.
  • Las personas que leen de forma efectiva construyen y revisan los significados creados mientras leen.
  • Comparan e integran el conocimiento existente con el recién adquirido.
  • Supervisan continuamente su comprensión del material leído.
  • Personas que leen de forma efectiva varían y adaptan su lectura de acuerdo con el tipo de texto que tienen en frente.
  • El procesamiento continúa incluso fuera del acto real de lectura.

Errores comunes de lectura

Tal vez ya hayas intentado incorporar los aspectos anteriores en tu lectura, pero por alguna razón no pareces mejorar. La mejora es en realidad un buen equilibrio entre la eliminación de errores y la adopción de prácticas más útiles. Desafortunadamente, si no te deshaces de los errores, tu lectura nunca mejorará significativamente. Es similar a una herida; mientras la suciedad y las impurezas estén presentes, se infectará continuamente y sanará lentamente. Debes eliminar los siguientes desechos de tu lectura:

  • Procesamiento superficial: según los estudios, es muy probable que seas el responsable de este error porque la mayoría de los estudiantes universitarios lo cometen. Tiene que ver con aceptar de forma previa el texto como cierto y con no relacionar la información leída con el conocimiento previo . Es cierto que tu libro de anatomía ha sido usado por muchas generaciones y es casi totalmente exacto, pero no apagues tu cerebro al leerlo. Para promover una comprensión profunda y una retención más prolongada, comienza a procesar la información en profundidad adoptando las características que describen al lector eficaz.
  • Leer todo de la misma manera: independientemente de si se trata de tu libro de ficción favorito, un periódico, un trabajo de investigación o un libro de texto de anatomía, los lees de la misma manera. Si bien abrir las páginas relevantes y leer robóticamente puede funcionar cuando se lee por placer, no funciona con la anatomía y viceversa. Si quieres enorgullecerte de tus resultados, ¡debes adaptar la herramienta a la práctica!
  • Resaltar incorrectamente: irónicamente, resaltar es como leer; casi todo el mundo lo practica, pero muy pocos saben cómo hacerlo correctamente. Piensa en la última vez que resaltaste. Si lo haces como la mayoría de los estudiantes, puede que hayas marcado casi todas las líneas y oraciones. Tu página parecía un radiante sol naciente. En realidad, resaltar debería reducir la cantidad que necesitas volver a leer en el futuro. Si casi todo está marcado, ¿de qué te sirve el esfuerzo adicional?
  • No previsualizar: esta es la semilla de la mayoría de sus errores de lectura. ¿Cuántas veces abres tu libro de anatomía y empiezas a leer sobre un tema sin tener idea de la estructura del capítulo? Probablemente siempre. Antes de ahondar en la parte más profunda, es crucial tener una idea de la sección. Mira los títulos, subtítulos, palabras en negrita y lee "en capas" (más detalles a continuación). Así evitarás el resaltado exagerado y la acumulación de notas porque podrás discriminar la información. Cada palabra parece importante la primera vez que lees el capítulo, así que deja el resaltador o el bolígrafo y echa un vistazo porque “la preparación es la clave del éxito” (Graham Bell, inventor del primer teléfono práctico).
  • Ignorar los resúmenes: muchos estudiantes ignoran los resúmenes por completo, y por tanto no los leen de manera efectiva. Por lo general, los resúmenes contienen el resultado final, es decir la información que necesitan saber para el futuro. ¿Estás seguro de que quieres saltarte esa mina de oro de información?

Método SQ3R

Ahora sabes el esfuerzo que requiere en términos de lectura y, lo que es más importante, lo que debes evitar. Sin embargo, pasar de cero a cien puede ser bastante confuso, especialmente con tantas características que describen al lector "perfecto". Una estrategia de lectura poderosa y útil que incorpora muchos de esos aspectos es el método SQ3R (por sus siglas en inglés Survey, Question, Read, Recite and Review). Aquí te explicaremos el significado y cómo puedes usarlo:

Paso 1: Reconocimiento (Survey): esto implica obtener una vista previa o echar un vistazo al capítulo deseado en tu libro de texto de anatomía. Busca algo llamativo, como títulos, subtítulos, diagramas, tablas, resúmenes, etc. Identifica la organización general del tema y lee "en capas". ¿Cómo haces esto? Como su nombre lo indica, lee ciertos tipos o "capas" de información. Específicamente, lee la primera oración de cada párrafo y lee cualquier oración que contenga al menos una palabra en negrita. Solo recuerda, es una vista previa, así que no pierdas mucho tiempo haciendo esto.

Paso 2: Pregunta (Question): este paso te permite poner el pie en la puerta y realmente comenzar a leer de manera efectiva. Mientras realizas una vista previa, haz tantas preguntas como sea posible. Trata de transformar cada encabezado en una pregunta, formula preguntas que esperas que el texto responda, crea futuras preguntas de examen, etc. Esencialmente, sé un niño curioso de cinco años que está constantemente buscando respuestas.

Paso 3: Lee (Read): te familiarizaste con el contenido y ahora es el momento de abordarlo. Pero ¡no lo sigas hasta el final! Divídelo en porciones de aproximadamente una o dos páginas. Intenta responder a tus preguntas anteriores y procesa en profundidad lo que estás leyendo. Intenta ajustarlo a tu red de conocimiento existente. Haz un esquema o toma notas. También puedes resaltar, siempre y cuando lo hagas correctamente. Para marcar correctamente, evita resaltar oraciones completas, encadena palabras para formar nuevas "oraciones" y deja a un lado el resaltador cuando realices una vista previa. Puedes ver un ejemplo de resaltado “correcto” en el siguiente párrafo. ¡Lee sólo las palabras en cursiva en orden!

Paso 4: Recita (Recite): esto implica recordar lo que acabas de leer. Cierra el libro y comienza a explicar lo que acabas de leer en las dos páginas anteriores (¡esto es en realidad recuerdo activo, un principio esencial para cualquier estudiante!). La forma más fácil de hacer este paso es usando el "método 2,1,0" (¡hay muchos más aquí!). Después de terminar tu explicación, rápidamente echa un vistazo a tu libro de anatomía y califícate: un "2" si recordaste la mayor parte de la información, "1" si fue alrededor de cincuenta y cincuenta y "0" si tu intento fue terrible. Este método es básicamente una prueba rápida. Recuerda conectar las ideas, simplificar los conceptos y usar tus propias palabras en lugar de la recitación pura.

Paso 5: Revisión (Review): este paso es más un proceso constante y continuo que debes realizar, especialmente para un tema lleno de hechos como la anatomía. Revisa las notas que tomaste e intenta responder las preguntas que formulaste al principio. En términos de un plan a largo plazo, entre los buenos métodos para revisar están los cuestionarios y diagramas para rotular de Kenhub. Al estar diseñados específicamente para ayudarte a aprender y poner a prueba todos tus conocimientos de anatomía, tu aprendizaje sin duda se disparará al usarlos. ¿Quieres ver los errores de aprendizaje más comunes que debes evitar al estudiar un tema, o repasar el corazón usando el recuerdo activo y la repetición espaciada? Ve y echa un vistazo, ¡te estamos esperando!

Como puedes ver, la lectura efectiva es extremadamente importante para aprender anatomía. Afortunadamente, puedes hacerlo con bastante facilidad evitando algunos errores comunes, adoptando algunos hábitos nuevos y utilizando un método diseñado específicamente como el SQ3R. No tomes la lectura a la ligera porque, al mejorarla, puedes desbloquear tu verdadero potencial de aprendizaje.

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